Concejal propone que partidos de la liga Colombiana sean por señal abierta para evitar aglomeraciones

Juan Martín Bravo, concejal de Cali, realizó esta propuesta teniendo en cuenta las aglomeraciones que se registraron, por el partido de ida de la Superliga Aguila entre el América de Cali y el Junior de Barranquilla

Este martes, en medio de la alerta y medidas por el COVID-19 varios establecimientos y zonas de la ciudad recibieron de nuevo el fervor de los hinchas, en este caso, del América por el partido de ida que disputaron los escarlatas frente al Junior, esto provocó aglomeraciones que pueden representar foco de contagios.

Es por esto que, Juan Martín Bravo, concejal de Cali, propuso que, por ahora, los partidos de la Liga Colombiana sean transmitidos por señal abierta y así evitar que las personas salgan de sus casas.

“Un llamado para que los partidos del fútbol colombiano sean por señal abierta, si bien lo presentado este martes donde vimos aglomeraciones, fueron porque la gente salió a buscar sitios donde tuvieran WIN+” aseguró el concejal.

Este viernes, la ciudad será testigo nuevamente de los 90 minutos finales de esta competencia que iniciará a las 7:00 p.m. en el estadio Pascual Guerrero sin público.

“La idea es que la gente pueda acceder a los partidos para que los puedan ver tranquilamente desde su casa durante esta temporada y así evitar más aglomeraciones y contagios” resaltó Bravo.

Parque Siete Ríos

La arquitectura es un rasgo distintivo de las ciudades y uno de sus mayores atractivos turísticos. Una representación de identidad que cobra importancia histórica. Monumentos como el Obelisco de Buenos Aires, la Torre Eiffel o el Arco del Triunfo en París son grandes ejemplos.
Cali tiene símbolos y lugares llamativos, disfrutables e históricos y cuenta con reconocimiento favorable entre las ciudades latinoamericanas por la salsa y el deporte. Pero falta ese monumento definitivo, persuasivo, icónico, y eso lo descubrí en una conversación con David Obando. Valdría la pena tener algo así, majestuoso, que aproveche el clima cálido, la vegetación local y el agua. Sería una obra diferente a los edificios para alojar habitaciones y oficinas. Su propósito es agradar a la vista, generar orgullo, interés y atención, aunque también cuente con zonas productivas.
En el corazón de la ciudad hay un lugar donde un proyecto de esta magnitud se puede hacer realidad. Desde Ciudad Paraíso, al frente del Palacio de Justicia, esta gran obra podrá ser vista en todo Cali.
Sería un gran parque con siete torres interconectadas por puentes o terrazas, cada torre representando a nuestros siete ríos. El espacio de los pisos inferiores estaría dividido en residencias y oficinas. En los pisos superiores habrá espacios de entretenimiento, restaurantes con mirador; en las terrazas habrá otros miradores a todo Cali junto a plazoletas de comida y la interconexión entre torre y torre.
El ejemplo más conocido de este estilo es el Marina Bay Sands, son tres torres hoteleras conectadas por un solar en Singapur. Le siguen Chang Building en Tailandia, que conecta tres torres de oficinas con un bloque superior, y las Torres Petronas de Malasia, unidas por un puente. Son proyectos que se han visto sobre todo en Asia, y aunque se ha explorado en Latinoamérica, no parece haber muchos de este estilo.
De hacerse realidad, debajo de las torres habrá mobiliario, plazoletas y un teatrino donde puedan llevarse a cabo grandes eventos como Cali Exposhow, el Reinado de Colombia, o cualquier otra posibilidad. Además, con su cercanía a la futura Estación Central del MIO, este sector se convertirá en una de las paradas obligadas para una futura peatonalización del centro de Cali.
La calle que se vaya a peatonalizar que conecte con este sector, sea la 12, 13 o 14, deberá estar conectada con el Bulevar del Río. Ya ahí, se podrá caminar hacia el sector de San Antonio con tranquilidad y en un bonito escenario, en cualquier momento del día.
Yo quiero cambiar la cara del centro de Cali. No puede seguir reinando otra ley por las noches mientras por la mañana y la tarde transcurre todo con normalidad. La vida nocturna del centro en otras ciudades importantes del mundo es lo más interesante y enriquecedor. Cali y sus habitantes se merecen eso.

Primer ‘Aniversario’ de semáforos sin funcionamiento en el sur de Cali

Un año completan sin funcionar los semáforos en la glorieta de Ciudad Jardín que fueron instalados en el 2019, en la calle 13 con 102 y 103 y en la Cañasgordas con 106.

Según la administración pasada esto se hizo bajo estudio, aún sabiendo que, aunque es una glorieta para que el tráfico fluya mucho más rápido, es una de las zonas más críticas por el alto flujo vehícular y estos semáforos aportarían al embotellamiento que se genera, en su mayoría, en las horas pico.

Pero, ¿por qué no se han puesto a funcionar?

«¿Por qué no se han completado esas obras? Si la Secretaría de Movilidad en el 2019 tenía que entregar un estudio como soporte a esa estrategia vial ¿Dónde están las adecuaciones? ¿Qué pasó con la compra del controlador semafórico y la señalización vertical y horizontal? ¿Qué ha pasado con los recursos asignados y aforados?» aseguró Juan Martín Bravo, concejal de Cali.

Sin embargo, si bien se necesitaron recursos para estudios, implementación e instalación, son semáforos que no han cumplido con el supuesto uso con el que inicialmente se invirtieron los recursos y que, un año después, siguen sin funcionar. ¿No se necesitaban con urgencia para mejorar el tráfico? ¿Detrimento patrimonial?.

Para recordar 👇🏻

https://youtu.be/huv_qHyk96s

Fuente vídeo: Radio Súper

¡Zona franca para Mipymes en el oriente!

Un éxodo de empresas ha ocurrido en Cali en los últimos años. La carga fiscal que se le impone al trabajo en Colombia es desproporcionada y le quita el atractivo natural a cualquier región. Uno de los países que más atrae inversión en estos momentos es México, donde se paga un 52% de impuestos sobre la utilidad neta. En Colombia se paga un 75.4%.
Estamos quedándonos atrás. Es apenas obvio que organizaciones como la antigua Andina de Heramientas, Mondelez, Michelín y Bayer decidan establecerse donde les ofrezcan mayores beneficios. Hasta grupos nacionales como Bavaria y Postobón han dejado la ciudad. Particular es el caso de Parquesoft, gigante del desarrollo tecnológico de origen local, que si bien cuenta con oficinas en la vía Cali-Jamundí, tiene gran parte de sus proyectos productivos en otros lugares.
En nuestra región, gracias a la Ley Paez, una gran área del norte del Cauca quedó convertida en zona franca, extendiendo los beneficios a las empresas que estaban allí para que no abandonaran la región. Por otro lado, Yumbo y Palmira ya han tomado la delantera con medidas de estímulo económico.
El problema está ahí, pero poco o nada se ha hecho para resolverlo. Cali sigue sin convencer a los empresarios a quedarse. El éxodo no se detiene y seguimos siendo víctimas de la falta de visión y el afán de las administraciones locales y nacionales del pasado.
Mi propuesta para evitar esta crisis y dar inicio al renacer del sector empresarial es crear una Zona Franca para MIPYMES, ubicada en el oriente de Cali y que genere empleo con mano de obra del sector.
Se trata de un sector de alto crecimiento y presencia. Según la Cámara de Comercio de Cali, 99.6% de las empresas de la ciudad son MIPYMES. Su relevancia a nivel nacional es innegable, sumando más del 61.2% del empleo colombiano.
El establecimiento de una zona franca brindaría grandes beneficios a este ecosistema. Bajo el amparo de distintos beneficios organizacionales, las empresas estarán en condición de asociarse, fortalecer su visión empresarial y solucionar dificultades.
En esencia, se establecerán incentivos tributarios específicos para las micro, pequeñas y medianas empresas que surjan o se trasladen al oriente de Cali, a cambio de pasar por un proceso progresivo de formalización empresarial y de empleados al menos por cinco años. Ahí se espera que estas organizaciones gestionen recursos, conecten con nuevos mercados y generen encadenamientos productivos.
La futura Universidad Distrital será fundamental en la formación de este capital humano, volcándose a la educación pertinente hacia el trabajo. La idea detrás de esto es garantizar la contratación de mano de obra calificada y del sector. Por su parte, el Concejo debería modificar el Plan de Ordenamiento Territorial para catalogar los lugares pertinentes como de uso industrial y comercial.
Las comunidades del oriente se beneficiarán más de esta zona franca si evitamos que se les despoje por la fuerza, manteniendo su presencia en el mercado local, protegiendo sus propiedades y evitando que el avalúo catastral se incremente. Además una mayor presencia de servicios sociales fortalecerá a las comunidades y hará que se integren a los proyectos empresariales que se gesten en la zona franca, de nuevo, con el respaldo de la Universidad Distrital.
Establecer esta zona franca fomentará la aparición de emprendimientos, productos e ideas. Esfuerzos similares a estos ya han dado resultados con iniciativas como Start-up NY Program en Nueva York, donde los beneficios de las zonas francas han sido orientados a los pequeños y medianos empresarios que quisieron crecer, salir adelante y formalizarse.
Según el Foro Económico Mundial, la competitividad reune las reglas, políticas y condiciones que ayudan a incrementar los niveles de productividad de la economía de un territorio. Cali cuenta con el capital humano para ejecutar cualquier proyecto y para incrementar la competitividad. Sin duda alguna, este es mi objetivo.
Pero más allá de generar competitividad y cifras, estas transformaciones buscan que en cada sector de la ciudad se pueda vivir bien. La meta debe ser que podamos vivir en comodidad, con dignidad y seguridad.