Desde 1996 se habla de una solución vial que podría conectar a las áreas rurales de Cali al occidente, y resolver la movilidad del kilómetro 18.
Se trata de la Vuelta a Occidente y tiene dos tramos. El primero va desde la salida de Cali por Cristo Rey y conecta a los corregimientos de Los Andes, Pichindé, Leonera, Felidia y El Saladito hasta la vía al mar. El segundo tramo conecta a La Elvira, La Castilla, La Paz, Golondrinas y Montebello desde la vuelta del Cerezo en la vía al mar hasta la salida por Chipichape, en la comuna 2.
De los 36 kilómetros del primer tramo, hay 5.6 kilómetros sin pavimentar del recorrido entre Pichindé y La Leonera. Del segundo tramo, de 26 kilómetros, no hay nada pavimentado.
La situación se congeló por muchos años y el proyecto renació más o menos hasta 2010, pero no ha podido realizarse, aunque haga parte del Plan de Ordenamiento Territorial de la ciudad en el Acuerdo 373 de 2014. Por un lado, han faltado los recursos. Por el otro, es necesario tramitar una licencia ambiental con la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), porque una de las zonas de intervención se encuentra en el Parque Natural Los Farallones.
Este es el momento de hacer realidad la Vuelta a Occidente, con sus Vías Colectoras Rurales, Vías de Integración Veredal y Vías Locales Rurales, de integrar a los corregimientos del área rural de Cali y de abrir una nueva era de desarrollo agrícola, turístico y deportivo de los corregimientos occidentales. Un proyecto completo, de una vía de 60 kilómetros por hora, que cuente con espacio para una cicloruta, costaría alrededor de 350 mil millones de pesos, considerando que también es necesario comprar algunos predios.
Para hacerla realidad, necesitamos inaugurar la Secretaría para el Desarrollo Rural y Agrícola de Cali, y el apalancamiento de los macroproyectos necesarios en nuestra zona rural. También necesitamos configurar una alianza público-privada y una concesión para el desarrollo de las vías, y considerar la designación de recursos por valorización.
El Gobierno Nacional podría jugar un papel importantísimo en el presupuesto, considerando la importancia de esta vía para descongestionar el kilómetro 18 y crear otra conexión entre Cali, Dagua y Buenaventura, y la obtención de las licencias ambientales con la ANLA.
La Vuelta a Occidente puede ser una solución inmediata para dar inicio al futuro de la ciudad. Está en nuestras manos hacerla realidad